Italia es un destino que particularmente me encanta. Me da igual la zona y la ciudad, siempre me parece una buena opción. Y pasa como en España, está cargada de rincones maravillosos.
En mi búsqueda para la siguiente escapada en familia, he fichado este peculiar destino: un pueblo medieval con mucha historia, situado en la región de Piamonte, en el norte de Italia, y a una hora de Milán.

Se trata de Candelo, un pueblo oculto en las colinas del Piamonte. Un destino rodeado de murallas, imponentes torres perfectamente conservadas (la principal es la Torre del Príncipe), callejuelas empedradas y casas de piedra, en el que se respira una atmósfera medieval que te trasladará directamente a la Edad Media.
Las casas de toda la zona eran almacenes y bodegas el pasado, utilizados para guardar productos agrícolas y como refugios temporales. Actualmente son talleres artesanales, pequeños museos temáticos, estudios de arte, bares y restaurantes.

Con un encanto especial, este antiguo refugio fortificado es conocido como Ricetto di Candelo (un ricetto medieval es una estructura fortificada comunitaria, creada por voluntad de los propios vecinos), considerado uno de los ejemplos de ricetto piamontés mejor conservados de Europa. Su construcción se remonta a finales del siglo XIII e inicios del XIV.

Un oasis de paz donde se respira historia a cada paso, una joya enclavada en la provincia de Biella, y un auténtico refugio fortificado que se presenta como uno de los pueblos más bellos y evocadores no sólo de Italia, sino del mundo, y está situado a una hora de Milán.
Podrás disfrutar de un día fantástico de turismo y también de su apetecible gastronomía: sus vinos típocos como el Barolo, Barbaresco y Moscato d'Asti, sus caracter´sticas trufas blancas y los quesos locales como el Gorgonzola, el Taleggio y el Toma Piemontese.
Fotos | @ricetto_di_candelo, Turiste percaso
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